La Dra. Astrid Heppenstall Heger es la directora ejecutiva del Programa de Intervención contra la Violencia (VIP), ubicado en el Centro Médico del Condado de Los Ángeles (LAC) + Universidad del Sur de California (USC), donde también es profesora de Pediatría Clínica. En 1984 fundó el Centro para el Niño Vulnerable (CVC) para la evaluación del maltrato infantil. Este fue el primer Centro de Defensa Infantil con base médica en el mundo y actualmente evalúa a más de 20,000 víctimas de abuso y agresión sexual infantil cada año. El Dr. Heger es un destacado experto en el campo del abuso y agresión sexual infantil y autor de numerosos artículos en este campo, así como del libro de texto definitivo “Evaluación del niño sexualmente abusado”, ahora en su segunda edición.

En 1995, estableció el primero de su tipo, el Centro comunitario de defensa familiar de “ventanilla única”, que ofrece servicios médicos, de salud mental, de protección, legales y sociales a las víctimas de violencia familiar y agresión sexual en todo el condado de Los Ángeles. En 1999, el Dr. Heger estableció un Equipo de Protección de Adultos y un Centro Forense de Abuso de Ancianos para brindar servicio directo a ancianos de alto riesgo y adultos dependientes, pero también para ayudar a los profesionales sociales, legales, médicos y de salud mental encargados de la protección de los más vulnerables. población. Además de los servicios para los más jóvenes y los mayores, VIP continúa brindando servicios las 24 horas del día, los 7 días de la semana a las víctimas de agresión sexual y violencia doméstica.

A partir de 2004, el Dr. Heger implementó un programa modelo “HUB” con servicios para niños en riesgo de estar en cuidado de crianza o que ya se encuentran en cuidado de crianza. Este programa clínico incorpora evaluaciones médicas y forenses las 24 horas del día, los 7 días de la semana, con un hogar médico continuo con servicios de salud mental integrados, así como servicios de apoyo que incluyen atención dental, cirugía plástica, tutoría y tutoría. A medida que más y más niños eran evaluados antes de ser colocados en hogares de acogida, quedó claro que era necesario un aterrizaje “suave” para estos niños, donde recibirían servicios médicos y de salud mental, así como comida, ropa, un baño y un lugar para descansar. dormir y jugar. El “Centro de bienvenida para niños” (niños de 0 a 12 años) y el centro complementario, el “Centro de bienvenida para jóvenes”, han cambiado el panorama de cómo los niños ingresan en hogares de acogida y han mejorado enormemente tanto las tasas de colocación como la permanencia de las colocaciones.




Traducir