Lanzar - ¡Sal y juega!
De 0 a 1 años: Actividades como gatear, deslizarse por el piso o caminar mientras se sujeta a los muebles fortalecen los brazos, las piernas y el tronco de su bebé. Ayude a su bebé a desarrollar habilidades de coordinación, importantes para lanzar una pelota más tarde, trabajando con él para apilar cartones de huevos o cajas de cartón livianas.
De 1 a 3 años: En esta etapa, los niños están naturalmente en movimiento, y usted puede ayudar al desarrollo de los músculos del brazo alentando a su hijo a salir del cochecito y empujarlo por sí mismo (solo asegúrese de estar lo suficientemente cerca para ayudarlo si lo necesita). Entre los 16 y los 23 meses, la mayoría de los niños comenzarán a ser capaces de lanzar. Asegúrese de que tenga una pelota para practicar su nueva habilidad y vaya al parque donde tiene espacio para correr y lanzar, incluso lanzamientos salvajes, de manera segura.
De 4 a 5 años: Los niños en edad preescolar pueden aumentar la fuerza y el control de los músculos grandes lanzando casi cualquier cosa. Anime a su hijo a arrojar conchas o piedras al agua en la playa. Para coordinar, practique "tirar al aro" tirando papel arrugado en la papelera o haciendo tiros con la ropa en la cesta de la ropa sucia. Muéstrele a su hijo cómo lanzar por encima y por debajo y trate de practicar en ambos sentidos.