Crianza de niños alegres
¿Cómo pueden los padres mejorar la moral familiar para criar hijos optimistas y alegres? Si bien las familias felices no son todas iguales, las investigaciones muestran que sí tienen algunas cosas en común. Estos son algunos hábitos de las personas más felices que pueden ayudar a cultivar la alegría en sus hijos y en usted mismo:
- Enseñe formas de conectarse con los demás. La vinculación con su recién nacido es el primer paso para enseñarle a un niño la alegría que se crea al conectarse. Tener relaciones positivas con los demás, desde amigos cercanos y familiares hasta personas de su comunidad, le muestra a su hijo cómo cultivar las relaciones. Hablar y demostrar formas de ser considerado y afectuoso con los demás ayuda a su hijo a aprender ese comportamiento y a experimentar la alegría que trae.
- Espere y elogie el esfuerzo. Los niños alegres se sienten validados por sus padres y cuidadores. Darse cuenta de cuando un niño se esfuerza aumenta la autoestima y la voluntad de asumir riesgos positivos. ¡Esto también se aplica a los padres! Olvídate de ser perfecto y date una palmadita en la espalda por trabajar duro y hacer tu mejor esfuerzo.
- Comer juntos. Las investigaciones muestran que las comidas familiares fortalecen las conexiones entre los miembros de la familia. Comer con regularidad con los niños aumenta la resiliencia y el sentido de pertenencia; los niños que comen con sus familias tienen un vocabulario más sólido, les va mejor en la escuela y son menos propensos a abusar de sustancias.
- Cree un ambiente hogareño más feliz. Cuando una casa está tranquila, limpia y segura, todos se sienten más felices. El ruido, las discusiones y la suciedad o el desorden pueden generar estrés; trabajar para cambiar esas cosas. Abra las ventanas y ventile la casa para cambiar de sentimiento. Tome nota de las cosas buenas de su vida y discútalas con sus hijos en casa.
Para obtener más información sobre niños más felices, visite nuestro Sección de salud mental