Desmitificando la equidad racial
Un estudio de la Universidad de Harvard encontró que las mujeres negras tienen hasta cuatro veces más probabilidades de morir durante el embarazo que las mujeres blancas. Numerosos estudios muestran que la raza de un niño es un predictor preciso de los resultados de su vida, desde la calidad de su educación y la capacidad para obtener un título universitario hasta la cantidad de dinero que ganarán a lo largo de su vida. Incluso la esperanza de vida se puede predecir en función de la raza. Estas estadísticas angustiosas son ejemplos de inequidad racial. La otra cara de este sistema injusto actual es la equidad racial.
La equidad racial es el trato justo de todas las personas, lo que hace que los resultados de la vida de nadie estén determinados por su raza. Bajo la equidad racial, todos reciben las mismas oportunidades, beneficios y herramientas para prosperar. La equidad racial no es solo eliminar la discriminación o las prácticas injustas, sino también implementar políticas y sistemas que aseguren la equidad para todos.
Para lograr la equidad racial, es necesario cambiar y mejorar cientos de años de políticas y prácticas que discriminan a las personas por raza, tanto intencionalmente como no. Aunque el progreso duradero se produce lentamente, puede promover la causa de la equidad racial de muchas maneras. A ello contribuye el silencio sobre el tema de la inequidad racial; simplemente hablar sobre la raza en Estados Unidos atrae la atención y la conciencia sobre el tema. El apoyo a las empresas locales mantiene el dinero en las comunidades y crea oportunidades para nuevos propietarios de empresas en el futuro. Votar y participar activamente en la política local para apoyar las políticas que se enfocan en la inequidad puede generar un cambio importante en su comunidad. Trabajando juntos, podemos lograr un sistema más justo y equitativo que beneficie a todos.